miércoles, 15 de octubre de 2008

Gliwice-Zabrze-Gliwice

Como la semana pasada tampoco pasaron muchas cosas intentaré relatar el mayor número de días posible en esta entrada para apurar y poner al día este blog denostado por la crítica.

Lunes 6 de Octubre de 2008

Otro día sin nada que hacer, estoy empezando a odiar este enfrentamiento con la nada. Sin embargo decidimos poner fin a semejante languidez y decadencia (pues no somos jubilados tirados en una residencia esperando la muerte sin presencia alguna de parientes, aunque el Alzheimer ayuda enes esos casos), así que a la tarde visitamos la ciudad vecina, Gliwice o también llamada Gleiwitz, que se encuentra a unos 10 kms. Para ello cogimos el tranvía, y de nuevo no marcamos el ticket para que nos sirviera para una próxima vez. Creo que habré hecho unos 8 viajes pagando sólo 50 céntimos de euro en vez de los 4 que debería haber pagado. Maravillas de las repúblicas ex-soviéticas supongo.

La verdad es que nunca vamos a aprender. Aquí anochece a las 6, y más temprano va a atardecer con el paso de los meses. Y de perdidos al río: fuimos a Gliwice después de comer, así que no dispusimos de muchas horas de sol en realidad. Es una ciudad mucho más concentrada que Zabrze (en la que estoy residiendo), hay un centro urbano determinado y se ve muchísima más gente en las calles. Vamos, todo más vivo. Y además no todo es cuesta arriba como en nuestra simpática ciudad. Aunque bueno, no me quejo pues tampoco es Vigo. Amén de que no tenemos que coger ningún autobús para ir a nuestra facultad. Sé lo que estáis pensando, ir de gratis en un bus no es tan fácil como el tranvía.

Aquí vemos a un hombre cogiendo por los pelos el VITRASA

He aquí algunas fotillos de lo más significante de Gliwice, que como podéis ver luce mucho más histórica y personal que Zabrze. Oh, espera, que no he puesto fotos de Zabrze! Bueno,va a ser un poco regreso en el futuro, es decir, las voy a poner después. Queda en vuestras manos qué decidís leer antes. A destacar de Gliwice su ambiente tropical, no por el calor, que va, si hacía frío, sino por la cantidad de mosquitos que hay en sus parques, mosquitillos pequeños que mientras hablas te tragas toda una dinastía de ellos, se pegan a la ropa, al pelo, a todo. Así cualquiera pierde toda la dignidad que a uno le podría quedar después de haber elegido Polonia como destino de Erasmus, imaginadme corriendo (bueno, con ropa y tal) a través del parque con la boca tapada con una mano y los ojos con la otra. Eeeso, eso es. Contárselo a todo el mundo, pero publicitando mi blog, claro está.

Hombres barbudos y serios, toda una tradición polaca


Sip, igualico que El Pianista. Pero sin muertos desperdigados por el suelo, una lástima.


Las terrazas se pueden poner de lujo aunque el edificio se caiga a pedazos.












Spain was there!


Residencia de invierno de Saurón, señor de Mordor


¡¡Al fin siento el poder entre mis piernas!!

Eso con pinta de nave especial es una terraza. Con efecto invernadero propio, al parecer.

Al llegar habíamos visto un Carrefour en el horizonte (nótese de que como aquí todo es excesivamente llano, lo más lejos que puedes ver algo depende de su altura) decidimos pasar por él antes de abandonar la ciudad de vuelta a la miserable Zabrze. Bueno, en realidad era un gigantesco centro comercial con Zara, Pull and Bear, y todas esas cosas. Y claro, Carrefour, donde me sentí infinitamente feliz por ser el afortunado comprador de una baguette, que no es que abunden por Polonia. Afortunadamente fue barata, unos 30 céntimos al cambio. El que fuera un 99% harina no me importó lo más mínimo, al fin me snetía europeo del sur. Y hete aquí que en la caja, mientras estaba pagando ¡nos encoentramos con otros españoles de Erasmus! es decir, el destino me guió primero al Carrefour, luego a aquella harinosa baguette para luego conducirnos a la única caja donde iban a estar los estudiantes españoles. Todo salía según el plan de Dios (en realidad es una burda mentira para no sentirme desgraciado) así conocimos a Miriam, Alberto y otros que están en el campus de Gliwice pero de la misma universidad. Nos intercambiamos messengeres y números, bueno, más bien Sabela, yo estaba ocupado degustando pan. O disgustando, vete tú a saber. Aunque de todas formas nos íbamos a ver el miércoles en Gliwice de nuevo, día de la reunión de Erasmus, pero así ya teníamos alguien con quien hablar y no parecer autistas.

Y volvimos a Zabrze. El infernal Zabrze. Y nada más aquel día.


Martes 7 de Octubre de 2008

A diferencia del anterior no era un día muy soleado, pero tampoco me quejo pues más bien estamos teniendo un tiempo mejor que el de nuestra Galicia natal . Me dediqué a la tarde a una necesaria tarea: deambular por Zabrze para conseguir documentos gráficos inéditos que atestiguasen que el hombre (español) ha estado allí, un pequeño paso para un gallego, para un gran paso para la Manulidad. He aquí las fotos que conseguí en esa dura tavesía en la que descubrí no uno, sino DOS Carrefour express. En uno de ellos finalmente pude encontrar yogures en pack de 4. Sí señores, nunca sabes lo que NO vas a encontrar en el extranjero y en Polonia no le van los yogures en pack de 4 y normales, le van más las tarrinas individuales. De hecho puedes comprar cada yogur del pack de 4 individualmente por unos 0,15€. Si eso lo intentas en España la loca de la cajera te puede castigar los oídos gritándote lo que no está escrito. Tras comprar uno de fresa y degustarlo con la mano (sí, uno no lleva siempre una cuchara a mano ¿qué pasa?) tras tan magnífica hazaña se puso a llover. Pero una lluvia no fina, finísima, molecular diría yo. Y algunas gente llevaban paraguas, manda cojones! yo estaba a 2 kms de la residencia y llegué apenas mojado. Polacos locos. No me extraña que su paraguas se llame "parasol" ,porque total, para la lluvia con la que tienen que lidiar...


¿un campo de refugiados en Zabrze?¿chabolismo gitano?¿hipotecas basura? respuesta más abajo



Ajedrez y Banco Santander. Combinación de la era modernda, digo yo.







¡nop, es un mercado!


El colorido hospital en construcción al lado de la residencia. Debe ser bonito morir en un sitio así.

Don Kichote!

Barbamán, se alimenta de flores


El milagro económico polaco: carteles MÁS grandes que los coches, uhm...

polacos y rusos unidos contra el fascismo ¿qué dices de dictadura comunista de 40 años?
Exacto. Casi muero atropellado.

Monumento al soldado polaco. Debe ser duro ser invadido por todos.

Miércoles 8 de Octubre de 2008

En realidad ese día teníamso una reunión con el señor Orko, pero fue pospuesta para el viernes debido a que días de presentación de Erasmus sólo ocurren una vez. Bueno, una ves por curso. Era a las 9:30, pero llegamos a Gliwice a las 9 para tener un margen, además no sabíamos en qué sala de la facultad de Mineralogía (un edificio d soviéticas proporciones) se celebraba la reunión, sólo que era una tal Sala Senatus. En la facultad preguntamos y preguntamos por ese lugar y por un momento pensé que estaba en otro planeta pues nadie sabía de qué le es la dichosa Sala Senatus. finalmente la encontramos e irónicamente habríamos preguntado a gente tan sólo a 50 cms de distancia. La próxima vez me centraré más en los carteles que en las personas.
Entramos a las 9:25 pues Agnieszka, la coordinadora de Erasmus nos vio y nos invitó a entrar. La sala era una estancia de buen ver adornada con una docena de cuadros de los rectores anteriores que gobernaron la universidad. Sin embargo supongo que para la próxima imagen tendrían que ampliar la sala o expulsar a algún cuadro existente pues ya estaba bien lleno. La gente comenzó a venir poco a poco, y sobre las 9:45 comenzó todo, y eso que aún faltaban sobre unos quince Erasmus.

¡La hora de los regalos promocionales en la sala Senatus! ojalá que le diesen paraguas gratias a los Erasmus que van a Santiago, porque los pobres piensan que todo en España es sol y mira...

La presentación fue encabezada por una mujer que nos habló de la universidad y sus facultades, fundada allá por los años cuarenta. Luego Agnieszka y otra mujer joven nos hablaron de lo que vamos a ahcer coo grupo, sitios que visitar, y más cosas relacionadas con las opciones de enrqiuecer nuestras vidas (pero no con dinero o armas d efuego, para nuestras cosnternación). También nos enseñaron el centro de deportes universitarios, donde incluso tienen una pista de hielo...¡cubierta! a mí que me lo expliquen, pues no le veo sentido a eso en un país como Polonia. Por cierto, visitad la pista de patinaje sobre hielo de Kansas City, está al aire libre y es 100% american. Bueno, a lo que iba. Por el camino fuimos conociendo algunos Erasmus, y casualmente hay una chica que también es de Pontevedra, de hecho su instituto está a 200 metros de mi casa. En general son algo mayores que yo, pues ya se sabe lo que tienen las ingenierías...¡planes de pensiones!

Algunos de ellos estaban algo perjudicados pues los días anteriores incluída la última noche habían sido de fiesta y desfase total. Ya ves, no sabes como deben envidiar mi pacífica vida en Zabrze. A destacar Javi (¿o era David? siempre me confundo) que siempre que le hablaba no me entendía, durante horas pensé que era por mi acento galaico y por mi escasas ganas de pronunciar bien. Y bueno, creo que algo de mi parte si que fue. Él y otros más, Miriam, Alberto (sí, lo del Carrefour), Miriam de Pontevedra, Omar y Esther nos relataron cómo fueron sus días hasta entonces y la diferencia es cruelmente abismal. Pero bueno, supongo que saldré de este estado de ermitaño poco a poco ¡tengo 9 meses para ello!


Diversa fauna Erasmus.Más peligrosos son los polacos.

Las coordinadoras polacas de los Erasmus nos guiaron a españoles, turcos, portugueses, un francés, un italiano, un polaco y vete tú a saber qué otros países, a través de Gliwice hasta el museo municipal, que de antaño había sido un castillo. Un museo pqueño pero decente, aunque como buen belicista eché en falta más cosas de la Segunda Guerra Mundial. Visitamos la catedral local, a la que ya había sacado fotos (véase arriba) y que se encuentra en mitad de ese parque plagado por mosquitos. Tras ello fuimos a la lujosa residencia de un industrialista de hace un siglo, William Caro creo que era su nombre, aunque de hecho no recuerdo siquiera si visitamos su casa antes del museo o después. Creo que tengo que ponerme más al día con este blog. Finalmente fuimos a un restaurante lujoso de cocina polaca ¡a cuenta de la universidad! el menú fue:

-Sopa agria con huevo
-Empanadillas mojadas de queso
-Tarta de manzana
-Bebidas: zumo de naranja o de arándanos (éste especialmente sabroso)

Tras socializar en la comida el día de presentación había acabado, y lo que hice fue acompañar a los Erasmus a sus residencias para saber dónde estaban y bueno, socializar más, que no viene mal. Tras ello volvimos a nuestra ajada, anticuada y sucia Zabrze. Oh, si hasta echo de menos el olor de churrasco por las mañanas...

bueno, mejor pensado no. Lo siento Iago ;)

"Good bye, Gliwice!"

1 comentario:

Anónimo dijo...

http://es.youtube.com/watch?v=L8NJFPskPWc

De mi compa de piso